Cuidemos a Chan Chan.

En el número 468 de la revista española Historia y Vida se hace mención a Chan Chan, la ciudad de barro más grande del mundo. Hasta hace cuatro años, la ciudad iraní de Bam gozaba de ese privilegio, pero un terremoto la redujo considerablemente.

Hasta ser conquistada por el implacable soberano inca Pachacutec, la ciudad de Chan Chan era la capital de la civilización Chimú. El sitio consta de diez ciudadelas amuralladas (una por cada soberano que la gobernó) y, a su alrededor, las ruinas de lo que una vez fue el barrio de las clases más bajas. El complejo habría albergado a 50.000 personas aproximadamente, convirtiéndola en uno de los centros urbanos antiguos más grandes de América.











Asentado sobre el antiguo territorio de la civilización Mochica, Chan Chan (que en lengua nativa significa sol-sol) encierra muchos misterios, ya que sólo el 5% de la ciudad ha sido excavado.

El conjunto arqueológico fue declarado Patrimonio de la Humanidad en 1986. Sin embargo corre el riesgo de perder gran parte de su esplendor. A las amenazas climáticas (como los terremotos y la corriente del Niño) se le suman el pillaje y el saqueo, además del abandono. El poco interés de las autoridades y la gran cercanía de una ciudad grande como Trujillo, aumentan aún mas dicho riesgo. Y como si fuera poco, el aumento de la capa freática humedece el suelo, que en un futuro no muy lejano podría provocar serios derrumbes.

Los arqueólogos han comenzado a tapar los descubrimientos con la misma capa de arena que los cubrió durante cientos de años para así poder retrasar el proceso que haría de Chan Chan una simple y triste masa de lodo y piedras.

Fuente: Revista Historia y Vida - Número 468.