12 de febrero de 2008

El Río de la Plata, escenario de la 2da. Guerra Mundial.

El primer - y único - momento en que la Segunda Guerra Mundial llegó a desarrollarse en alguna parte de Sudamérica, fue durante la llamada Batalla del Río de la Plata, en el último mes de 1939. Las aguas uruguayas del río fueron testigos del enfrentamiento entre el Panzerschiff acorazado de bolsillo alemán Admiral Graf Spee y los cruceros ingleses Ajax, Achilles y el crucero Exeter.

El Atlántico Sur era el objetivo del Graf Spee. Sus acciones (capturar cuatro barcos y hundir un vapor evacuando antes a su tripulación) lo llevaron a ser perseguido sin éxito por la marina británica. Así Hans Langsdorff, su capitán, decidió incursionar en aguas sudamericanas. Pero luego de hundir otro carguero, al amanecer del día 13 de diciembre, los barcos ingleses se hacieron presentes.

En el combate, el Exeter abandona la contienda por los daños recibidos y los otros dos cruceros también están dañados. El capitán Langsdorff toma la desición de entrar al puerto de la ciudad de Montevideo, pero el plazo establecido por el gobierno uruguayo vence el 17 de diciembre y el acorazado alemán abandona el puerto. Este es fondeado cerca de la costa y su tripulación aborda el carguero Tacoma. El Admiral Graf Spee es volado por orden de su capitán.

Gran parte de los tripulantes fueron trasladados a Montevideo y a Buenos Aires en remolcadores y embarcaciones pequeñas. Muchos fueron puestos en libertad y regresaron a Alemania, mientras otros fueron internados en cuarteles militares uruguayos y argentinos, para su futura repatriación.

El capitán alemán Hans Langsdorff se disparó en la cabeza en la habitación del Hotel Naval en Buenos Aires el 19 de diciembre de ese mismo año. Estaba envuelto en la insignia de batalla del Graf Spee.

4 comentarios:

Franco A. dijo...

Hola, interesante entrada, pero esa accion fue realmente una batalla? lo digo porque creo que la estadia del Graff von Spee en aguas territoriales sudamericanas se limito a intercambiar algunas salvas en una pequeña escaramuzay a refugiarse en el puerto y rehusar entrar en combate con lso cruceros ingleses (discutible accion, su superioridad artillera podria darle alguna ventaja para escapar) y posteriormente evacuar la tripulación e hundir el barco.

Tambien no recuerdo donde lei pero Langsdorff se envolvio en la bandera imperial alemana al momento de morir, repudiando de cierta forma el nazismo al no usar la bandera nazi.

Saludos.

niklaüss dijo...

Interesantes observaciones Zub. Los manuales la llaman Batalla del Río de La Plata. De hecho el enfrentamiento armado existió y duró casi dos horas.

Y quizás sí, Langsdorff al ser un hombre patriota, sólo obedecía órdenes nazis, pero él luchaba por su país, asique seguramente haya denostado al régimen.

Anónimo dijo...

Me hace añorar los tiempos en que los militares tenían honor y se suicidaban ante la vergüenza de la rendición.Hoy dan conferencias de prensa antes y/o depués de rendirse. ¿Se acuerdan de Leandro Benjamín Menéndez y sus declaraciones de que iba a morir en Malvinas? Y si hubo una guerra perdida por impericia criminal fue esa.

Amarguras aparte, te felicito por cómo estás llevando tu blog.
Un abrazo

niklaüss dijo...

Gracias Jorge! Hablando de honor, era el que le faltó a Nerón, citando tu blog, no?

Un saludo.